El piloto holandés consiguió un gran triunfo en Losail tras haberse repuesto de la sanción que le quitó la pole. Rui Marques fue el gran protagonista de la jornada. McLaren y Ferrari definen el Campeonato de Constructores en Abu Dabi.
Fue uno de los grandes premios que más cantidad de incidentes tuvo en la temporada 2024. Tres Safety Car y un sinfín de penalizaciones hicieron que la competencia en el Circuito Internacional de Losail sea por demás atractiva para los seguidores de la Fórmula 1 y nada de ello impidió una nueva demostración de talento y astucia por parte de max Verstappen que se llevó el triunfo tras liderar la carrera de punta a punta.
El tetracampeón había sido ridículamente sancionado el sábado luego de haber marcado la pole por Dirección de carrera alegando que Max iba innecesariamente lento en una vuelta de enfriamiento cuando en el video de la cámara onboard de George Russell se observa claramente como acelera para acercarse a Verstappen. De allí el enojo del piloto holandés con su colega de Mercedes.
Max es un elegido, un ser tocado con una varita mágica como Lionel Messi, Diego Maradona, Michael Jordan, Juan Manuel Fangio, Ayrton Senna o Michael Schumacher. Lo peor que se puede hacer con estas personas es hacerlas enojar. Y eso lograron con el piloto holandés, quien no necesita más que enojarse para enfocarse y pensar solamente en ganarles a sus rivales. Son deportistas que compiten para ganar y no sólo para competir.
Y así largó, furioso y dispuesto a recuperar lo que según él le habían arrebatado injustamente. Russell no pudo hacer nada por frenar a Verstappen que lo superó en la largada misma y ya no lo vio más en sus espejos. Ni siquiera Lando Norris con un auto muy superior al RB20 pudo complicarlo porque enseguida le quitó la posibilidad de utilizar el DRS. Super Max no vio comprometido su triunfo en ningún momento, ni siquiera en los relanzamientos tras la ida de los Safety Car.
Fue tal la vorágine causada por el ritmo endemoniado que tuvo la carrera que pilotos que habitualmente no terminan en la zona de puntos pudiesen rescatar algo como fueron los casos de Pierre Gasly (terminó décimo y se llevó diez unidades a Endstone) y de Guanyu Zhou con su octava posición que le valieron cuatro valiosas unidades para Sauber, justo cuando se conoció la compra de una fracción del equipo por parte del fondo soberano de inversión catarí.
Los cinco abandonos que tuvo la carrera y la infinidad de penalizaciones que repartieron los comisarios muestran lo áspera que fue la competencia. En la largada hubo dos choques (Esteban Ocon, Nico Hülkenberg y Franco Colapinto por un lado y Lance Stroll y Alex Albon por el otro) donde el piloto argentino y el ex hombre de Alpine (será reemplazado por Jack Doohan en Abu Dabi) quedaron fuera de combate. Franco está pasando un momento muy complicado en la categoría donde sólo queda apretar los puños, aprender y seguir adelante.
La FIA tendrá que hacer algo con Dirección de Carrera ya que Rui Marques repartió sanciones sin tener en cuenta absolutamente nada. Liam Lawson recibió diez segundos de penalización por haber realizado un trompo pero eso para los comisarios fue causar una colisión. Ni hablar sobre la demora para sacar un Virtual safety Car o Safety Car para retirar el espejo de Alex Albon.
El Campeonato de Constructores se definirá en Yas Marina ya que Ferrari le recortó puntos a McLaren quedando a sólo veintiún unidades de distancia. Será una lucha muy pareja que se decidirá por pequeños detalles y donde tanto Red Bull como Mercedes pueden ser árbitros en esta puja. Italianos e ingleses sueñan con salir campeones luego de dieciséis y de veintiséis años respectivamente. ¿Será rosso corsa o papaya?
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Fotos: gentileza Red Bull Content Pool
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